sábado, 10 de noviembre de 2007

Bitakora Koadenoa.1.11.2007

Novedades: El Dr. dice que el tratamiento va bien.Nos estamos cargando leucocitos a buen ritmo. Sólo nos quedan 4000, pero no se nos puede escapar ninguno.Todos los órganos responden bien al tratamiento.
Comienzan las transfusiones de sangre. Mi hermana Odile se pregunta si será de donantes simpáticos.Mejor que sí.
Sensazioak:Nire gelako lehiotik hiria eta itsasoa ikusten ditut. Zer ondo.
Egonezina daukat ordenagailua falta zaidalako.Argi dago beldurra diotela ezer egin gabe egoteari eta neure gogoeteri aurre egiteari.
Gainera, aitzaki berri bat daukat: "Nire buruak lasaitasuna behar du eta ardurak uxatu".
Ez nago zihur aktibitate minimoekin entretenitzea burua eta arima indartzeko bide egokiena denik.
Emozioak:Baikor. Medikoak esanagatik eta Ginok emandako bultzadagatik.
Se proyectan en un diaporama loco mensajes que he recibido estos días y recuerdos de trocitos de pasado que hemos compartido . Los ojos se me llenan de lágrimas bombeadas desde las entrañas.
...eta begiak hesteetatik indarrez bultzatutako malkoz betetzen zaizkit. Sarritan.
Reflexiones: Sabemos lo que significan los prejuicios raciales. También sabemos que nos afecta mucho menos emocionalmente si la desgracia, la catastrofe o la matanza de turno se produce en países alejados y entre personas de otro color y cultura.
Se ha escrito mucho sobre esto y asumimos que no podemos vivir con la consciencia cotidiana de tanto dolor, y por ello, nuestra capacidad de empatía se intensifica con la proximidad.
La distancia o la proximidad no es única discriminación que aplicamos. También discriminamos en función de la categoría social de las personas: Las desgracias de un cultivado médico iraní nos resultan más cercanas que las mismas sufridas por un campesino afghano y un alzheimer precoz diagnósticado a nuestro notario o al ayudante de nuestro fontanero no nos impresionan igual.
Será que tenemos sentimientos muy distinguidos.

No hay comentarios: